En las sucesivas revisiones, continuaremos trabajando los objetivos que hayamos planteado en un primer momento y valoraremos si es necesario adaptarlos y cambiar nuestra perspectiva o el abordaje que estamos haciendo. Siempre de forma progresiva, aprendiendo a relacionarnos saludablemente con la comida y sorteando de la mejor forma posible los obstáculos que se nos presenten. Valoraremos la evolución de la composición corporal, sintomatología de patologías específicas y otros aspectos de la salud.
Buscaremos estrategias para hacerte fácil aquellos cambios más complicados; siempre a tu ritmo, y en cada visita iremos aportando nuevas ideas de recetas y menús, herramientas y otros recursos al margen de la pauta dietética para ayudar a asentar nuestros nuevos hábitos y alcanzar el objetivo.
La duración de estas visitas en la mayoría de casos es de media hora, salvo casos de patologías específicas (digestivas, alergias e intolerancias, procesos oncológicos, etc.) que suelen durar de 45 minutos a una hora.
La frecuencia depende del objetivo y nos iremos adaptando en función de tus necesidades, aunque al inicio del tratamiento lo recomendable es hacerlo cada dos o tres semanas.
En cada visita iremos haciendo sesiones de educación nutricional y te proporcionaré herramientas y recursos al margen de la pauta dietética con el fin de que, una vez alcanzado el objetivo, seas capaz de acoplar todo lo aprendido a tu vida diaria y continúes por el camino que hemos trazado juntos; Pero esta vez te tocará recorrerlo solo.